La reducción de la superficie de siembra en Sonora, causada por la escasez de agua, está teniendo un impacto significativo tanto en la producción agrícola como en el sector ganadero. Esta situación ha sido señalada por Ricardo Flores Argüelles, secretario de la Asociación Ganadera Rafael Russo Voguel, quien advirtió sobre las consecuencias económicas y la escasez de alimentos para el ganado.
Flores Argüelles destacó que, si continúa la disminución en la superficie de siembra, se verá afectada la disponibilidad de forraje, incluyendo maíz, trigo, pacas de frijol y alfalfa, fundamentales para la alimentación del ganado.
Según las últimas reuniones del Consejo del Distrito de Riego 038 del Río Mayo, el agua disponible en la presa Mocuzari (que cuenta con 251 millones de metros cúbicos al 20 de septiembre) solo permitirá sembrar aproximadamente 27,000 hectáreas en el próximo ciclo agrícola.
A pesar de esta difícil situación, los productores se mantienen optimistas y esperan que la llegada de algún fenómeno tropical pueda traer lluvias significativas que beneficien el embalse. “Estamos en una época en que podría presentarse un fenómeno tropical, y ojalá que llegue algo que nos favorezca”, expresó.
En comparación, el año pasado en la misma fecha, la presa contaba con 419 millones de metros cúbicos, lo que resalta la gravedad de la actual crisis hídrica.
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