En su reciente obra Por qué los países fracasan, los economistas ganadores del Premio Nobel de Economía 2024, Daron Acemoglu, Simon Johnson y James Robinson, lanzan una fuerte crítica hacia el magnate mexicano Carlos Slim, sugiriendo que su riqueza no proviene de la innovación, sino de estrategias que han limitado la competencia en el mercado.

La Estrategia de Adquisición de Telmex

Slim, quien inicialmente se destacó en el ámbito bursátil, consolidó su poder con la adquisición de Telmex en 1990. A pesar de que su oferta no fue la más alta, logró el control sobre la empresa estatal privatizada, utilizando los dividendos generados por Telmex para financiar la compra. Este movimiento transformó un monopolio estatal en un monopolio privado, generando significativas ganancias para Slim y fortaleciendo su dominio en el sector.

Un Ecosistema que Favorece a los Poderosos

Los autores señalan que el éxito de Slim no es un ejemplo de innovación empresarial, sino de su capacidad para operar dentro de un sistema económico caracterizado por altos obstáculos burocráticos y políticos. En comparación con Estados Unidos, donde las oportunidades para los emprendedores son más accesibles, en México las barreras, como trámites complejos y licencias restrictivas, favorecen a aquellos con conexiones políticas, permitiendo que Slim se expanda en América Latina.

Un Reconocimiento a la Investigación Económica

El Premio Nobel de Economía 2024 fue otorgado a Acemoglu, Johnson y Robinson por su investigación sobre el impacto de las instituciones en el desarrollo económico. Su trabajo destaca cómo las estructuras económicas pueden perpetuar desigualdades y limitar el crecimiento inclusivo. Las instituciones que no favorecen la competencia tienden a concentrar poder y riqueza, como se observa en el caso de Slim.

Reflexiones Finales

La crítica a Slim sirve como un ejemplo de cómo los sistemas económicos pueden favorecer a unos pocos a expensas de la innovación y la competencia. Esta narrativa resuena con la visión de los Nobel sobre la necesidad de instituciones inclusivas que promuevan el crecimiento equitativo. El Premio Nobel, dotado con 11 millones de coronas suecas (aproximadamente 1.1 millones de dólares), refuerza la importancia de estas ideas en la comprensión del desarrollo económico global.

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Por Redaccion

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