Con la llegada del otoño y las festividades de Halloween, Sonora se destaca como el mayor exportador de calabazas hacia Estados Unidos, consolidando su papel fundamental en esta temporada tan esperada.
La Tradición de Halloween
Aunque Halloween es una celebración originaria de Estados Unidos, su popularidad ha crecido en el noroeste de México, especialmente en las ciudades fronterizas. Las calabazas, un símbolo icónico de esta festividad, no solo decoran los hogares, sino que también son protagonistas en la cocina, aportando sabores característicos de la temporada.
Producción de Calabazas en Santa Cruz
En el pequeño municipio de Santa Cruz, Sonora, con aproximadamente 2,000 habitantes, se cultivan las famosas “calabazas de Halloween”. Ubicado estratégicamente cerca de la frontera, este lugar ha ganado relevancia por su producción, que se exporta masivamente a Estados Unidos, donde Halloween se celebra con gran fervor.
La llegada del otoño marca el inicio de la cosecha, un evento que no solo impulsa la economía local, sino que también posiciona a Sonora como un proveedor clave de este producto emblemático. Las calabazas de Santa Cruz son reconocidas por su calidad y se distribuyen a través de las principales cadenas de supermercados en Estados Unidos.
Impacto Económico y Social
Los habitantes de Santa Cruz participan activamente en la cosecha, fortaleciendo la economía de la comunidad y creando un sentido de identidad vinculado a esta tradición internacional. Esta actividad agrícola se ha convertido en un pilar económico, permitiendo a los residentes ver cómo sus productos decoran y enriquecen miles de hogares en Estados Unidos durante Halloween.
Proceso de Producción
La producción de calabazas en Sonora es un proceso meticuloso que comienza mucho antes de la llegada del otoño. Desde julio, los agricultores de Santa Cruz se preparan para la temporada alta de cosecha. Esta planificación anticipada es crucial, ya que las calabazas deben estar listas entre septiembre y octubre, con una fecha límite de cosecha establecida para mediados de octubre, justo a tiempo para las festividades.
Conclusión
Sonora no solo es conocida por su belleza natural y cultural, sino también por su papel vital en las celebraciones de Halloween en Estados Unidos. Con cada calabaza que sale de Santa Cruz, se envía un pedazo de identidad sonorense al mundo.